Sobrevivencia: vida después del cáncer de cabeza y cuello

Efectos tardíos y a largo plazo del tratamiento

Hay varios tratamientos que se utilizan para los cánceres de cabeza y cuello, como cirugías, radiación y medicamentos (quimioterapia, terapia dirigida). Estos pueden tener como resultado efectos a largo plazo (los que continúan después del tratamiento, como la fatiga) o efectos tardíos (los que se desarrollan meses o años después del tratamiento). Estos efectos pueden causar problemas para masticar, tragar, hablar y respirar. Los problemas específicos pueden incluir:

• Aspiración (la inhalación de alimentos o líquidos en los pulmones, que puede provocar neumonía).
• Disminución del rango de movimiento en el cuello y los hombros.
• Dificultad para abrir la boca por completo (trismo).
• Síndrome del primer mordisco (dolor provocado por la salivación o la masticación).
• Parálisis del nervio espinal accesorio (debilidad de los músculos en el área del cuello y los hombros).
• Linfedema (hinchazón como resultado de la extirpación de los ganglios linfáticos en una cirugía).
• Sequedad de boca (xerostomía).
• Cambios en cómo saborea, huele y oye.
• Cambios en cómo se ve y habla.

Estos efectos pueden ser temporales, durar meses después del tratamiento o volverse permanentes. Algunos problemas no ocurren de inmediato, sino que se desarrollan meses o años después del tratamiento. Los fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales y de linfedema, fisiatras (médicos de rehabilitación de cáncer), expertos en habla y deglución, dietistas, cirujanos plásticos, fabricantes de prótesis, especialistas en manejo del dolor y ortodoncia pueden ser útiles para manejar estas inquietudes.

Cuándo llamar a su proveedor

Tenga en cuenta los signos de reaparición del cáncer (lo que se denomina recurrencia), que pueden incluir:

• Pérdida de peso.
• Toser o escupir sangre.
• Dificultad para tragar o abrir la boca por completo, dolor en la boca que no sana, cambio en la voz o dolor de oído (especialmente al tragar).
• Comuníquese con su proveedor de atención médica si presenta algún síntoma preocupante.

Nutrición, habla y deglución

Es importante que consuma suficientes calorías para evitar la pérdida de peso. Si tiene dificultades para comer y / o mantener su peso, debe consultar con un dietista oncológico para obtener ayuda. Algunos sobrevivientes pueden necesitar una sonda de alimentación para proporcionar nutrición si comer y / o tragar son extremadamente difíciles. Un patólogo del habla y la deglución puede ayudarlo a manejar los problemas del habla y al uso de dispositivos para comunicarse si su habla no es clara. Un patólogo del habla y la deglución también puede ayudar a controlar los problemas para tragar, incluso cuando se desarrollan años después del tratamiento.

Vida saludable

Trabaje para realizar cambios de comportamiento saludables o simplemente para volver a los comportamientos saludables que tenía antes del tratamiento.

• Si es fumador, pídale a su proveedor que le ayude a dejar de fumar. Fumar puede aumentar en gran medida el riesgo de un segundo cáncer o una recurrencia.
• Limite la cantidad de alcohol que bebe, si lo toma.
• Haga ejercicio con regularidad. Esto puede significar un paseo con un amigo, ¡es posible que no esté listo para mucho más! Empiece donde está y aumente gradualmente su actividad.
• Un buen cuidado dental y un seguimiento regular con un dentista son especialmente importantes después de la cirugía y / o la radiación. Usted tiene un mayor riesgo de desarrollar caries dental (caries) debido a la boca seca que a menudo resulta de la cirugía y / o radiación.

La calidad de vida puede ser una gran preocupación para los sobrevivientes de cánceres de cabeza y cuello. La depresión y la ansiedad son problemas comunes que enfrentan los sobrevivientes. No dude en hablar sobre sus inquietudes con su proveedor de cuidado médica. Unirse a un grupo de apoyo puede ser una excelente manera de ver cómo otras personas viven la vida al máximo después del cáncer. SPOHNC.org es una organización de apoyo específicamente para personas con cánceres de cabeza y cuello. Tienen sucursales en los Estados Unidos y una línea de ayuda a la que puede llamar. También puede enfrentar desafíos debido a cambios en su apariencia, capacidad para hablar o comer. Unirse a grupos y acceder a asesoramiento de apoyo puede ayudarle a gestionar estas inquietudes.

Conclusiones Clave

• Informe cualquier signo de recurrencia, incluida la pérdida de peso, tos con sangre, dificultad para tragar, dificultad para abrir la boca, llagas en la boca, cambios en la voz o dolor de oído (especialmente al tragar).
• Hable con un dietista si tiene alguna inquietud sobre nutrición o peso.
• Hay varios especialistas que pueden ayudar con los efectos tardíos del tratamiento del cáncer de cabeza y cuello. Pídale a su equipo de oncología que lo remita a especialistas según sus inquietudes específicas.
• Visite a su dentista dos veces al año y practique un buen cuidado bucal. Su dentista puede recomendarle tratamientos frecuentes con flúor.
• No fume. Si fuma, pídale ayuda a su proveedor para dejar de fumar. Limite la cantidad de alcohol que bebe, si es que bebe.
• Informe cualquier inquietud relacionada con la depresión o la ansiedad a su proveedor de atención médica. Considere la posibilidad de recibir asesoramiento o grupos de apoyo para ayudarlo a sobrellevar la situación.